El 11 de diciembre del año 2006, el entonces ilegítimo presidente de México lanzó el llamado Operativo Conjunto Michoacán. Así, en su propia tierra que lo vio nacer, dio inicio a la guerra contra el narcotráfico y el crimen organizado a nivel nacional. Miles de muertos de ambas partes, funerales de militares, marinos, presuntos delincuentes y civiles inocentes, a quienes les llamó: “Daños colaterales”.
Leer nota completa:
https://www.excelsior.com.mx/opinion/ricardo-peralta-saucedo/el-marro-y-la-mafia/1397594